El genocidio Selk’nam y el rol de los salesianos con una mirada histórica y desde la lógica evangelizadora, es decir, reconociendo el contexto y las intenciones de los misioneros, sin omitir las consecuencias profundas de su accionar sobre el pueblo originario.
El genocidio Selk’nam y la evangelización salesiana
Entre la cruz, la tierra y la extinción
A fines del siglo XIX, la Tierra del Fuego fue escenario de uno de los procesos de exterminio indígena más brutales y rápidos de la historia latinoamericana moderna: el genocidio del pueblo Selk’nam (también conocidos como Onas), originarios de la isla grande de Tierra del Fuego.
🏹 Un pueblo nómade del sur del mundo
Los Selk’nam habitaron durante milenios el norte y centro de la isla fueguina, cazadores-recolectores con una rica vida simbólica, complejas ceremonias (como el Hain), y una organización social adaptada al clima hostil del extremo sur. Su cosmovisión estaba profundamente ligada al territorio, al ciclo de los animales, y a los espíritus del bosque y del cielo.
Con la “fiebre del oro” y la expansión de la ganadería ovina, primero colonos europeos y luego empresarios argentinos y chilenos comenzaron a invadir y alambrar las tierras que habían sido tradicionalmente de libre tránsito para los Selk’nam. Esto los privó de sus recursos vitales, especialmente del guanaco, y desató un conflicto inevitable.
⚰️ La caza del indio
Desde 1880 hasta aproximadamente 1920, los Selk’nam fueron perseguidos, asesinados y desplazados de manera sistemática. Estancieros y buscadores de oro contrataron pistoleros y ofrecían recompensas por cada indígena muerto. Mujeres, niños y ancianos eran abatidos sin distinción. Se documentan campañas armadas con listas de muertos, pagadas por los principales estancieros de la región.
Fue una forma explícita de genocidio, tanto en términos físicos como culturales.
✝️ La llegada de los salesianos
En este contexto brutal, los misioneros salesianos llegaron a Tierra del Fuego desde 1887, bajo la conducción del sacerdote José María Beauvoir, discípulo de Don Bosco. Establecieron misiones como San Rafael (en Río Grande) y luego Nuestra Señora de la Candelaria (en la actual Porvenir, Chile).
Su proyecto tenía un claro objetivo evangelizador y civilizatorio: proteger a los indígenas del exterminio material, pero también convertirlos al cristianismo y transformarlos en “hombres nuevos”, según la visión europea de la época.
📿 Intenciones y contradicciones
Los salesianos se propusieron:
- Rescatar indígenas del entorno hostil y llevarlos a las misiones.
- Bautizarlos, enseñarles el catecismo y alfabetizarlos.
- Sustituir su lengua y prácticas religiosas por la fe cristiana.
- Promover trabajos agrícolas y sedentarios.
Aunque en muchos casos los misioneros protegieron a los niños y denunciaron públicamente la caza de indígenas, su acción también implicó la desestructuración cultural profunda del pueblo Selk’nam. En las misiones murieron muchos por enfermedades europeas, desnutrición, tristeza y rupturas familiares.
Beauvoir, que era también un etnógrafo aficionado, recogió información valiosa sobre los Selk’nam, pero contribuyó activamente a su integración forzada al modelo occidental. Su obra puede ser vista hoy como un testimonio ambiguo: valiosa como registro, dolorosa como herramienta del desarraigo.
🔚 Fin de un pueblo, persistencia de la memoria
Para la década de 1930, la población Selk’nam estaba prácticamente extinguida. De los cerca de 4.000 que habitaban la isla en 1880, apenas sobrevivían unas decenas, muchos de ellos criados en las misiones, separados de sus raíces y lengua.
Hoy, descendientes Selk’nam —en Argentina y Chile— impulsan procesos de reconocimiento, recuperación lingüística y territorial, y reclaman que el genocidio sea reconocido oficialmente por los Estados.
🕊️ Evangelización y memoria
Desde una mirada histórica, la acción salesiana debe ser comprendida en su doble dimensión:
- Como intento sincero de protección frente al exterminio físico, muchas veces enfrentando a estancieros y autoridades.
- Pero también como parte de un proyecto civilizatorio y asimilacionista, que contribuyó a la pérdida de la identidad cultural indígena.
En tiempos actuales, algunas voces dentro de la Iglesia han pedido perdón por este pasado. Otras lo siguen relativizando.
La historia del genocidio Selk’nam y de la presencia salesiana en Tierra del Fuego es un espejo incómodo de la relación entre fe, poder, colonización y memoria. Una historia que debe ser contada completa, sin omitir luces ni sombras.
¿Deseas que profundice en alguno de estos aspectos (Beauvoir, las misiones, el Hain, los descendientes actuales)? También puedo preparar una línea de tiempo o material educativo.